Buenos Aires, 28/03/2024, edición Nº 4954
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Los vecinos ya pueden señalizar sus garajes pintando los cordones de amarillo

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(Barrio de Flores) Para impedir que se estacionen vehículos obstruyendo la entrada de sus garajes, los vecinos ya pueden señalizarlos pintando los cordones de amarillo. El Gobierno porteño acaba de reglamentar una ley aprobada en diciembre que permite reservar espacios en la vía pública. Esta reglamentación indica cómo hay que realizar las demarcaciones.

Tradicionalmente, los vecinos resguardaban las entradas de sus garajes con conos, bloques de cemento, caños incrustados, cajones de manzanas o hierros perpendiculares al cordón. Todas medidas tan ilegales como desesperadas para impedir que estacionen vehículos bloqueando el paso. Un problema que también suele generar peleas y reacciones violentas, que van desde insultos hasta casos extremos. Como el de un hombre que rompió a hachazos un auto estacionado frente a su garaje, hace cuatro años.

Con el fin de colaborar con la solución de estas situaciones, es menester la demarcación de cajones en la calzada”, dice la ley, que fue impulsada por el legislador Sergio Abrevaya (GEN). En principio, la norma modificó el Código de Tránsito, que antes prohibía las reservas de espacios en la vía pública para estacionamiento de vehículos. A partir de este cambio, ahora están permitidas.

La demarcación debe ser hecha por el frentista, a su costo, y con las siguientes características: “Serán dos líneas de un metro y medio de largo perpendiculares al cordón, ubicadas medio metro de cada lado del ancho de la entrada. Las líneas deberán ser de trazo continuo, amarillas y de 0,10 metros de ancho, estando prohibido el estacionamiento entre ellas”.

En la reglamentación, que fue publicada esta semana en el Boletín Oficial de la Ciudad, se especifica que el frentista tiene tres opciones: pintar de amarillo sólo el cordón; además del cordón, pintar también dos líneas perpendiculares a este, o como tercera alternativa, sumar una línea paralela al cordón y que una las dos perpendiculares. Así quedará conformado lo que se conoce como “cajón en entrada a cochera”.

Se sugiere pintar el cordón con pintura acrílica y se recuerda que las líneas deberán ser de color amarillo y de trazo continuo”, recomienda la reglamentación. También aconseja “utilizar cinta métrica, papel de diario y/o cinta de papel para respetar los grosores y las geometrías y así evitar manchas en la vereda y la calzada”.

Quienes opten por las primeras dos alternativas, ya pueden hacer sus demarcaciones amarillas sin necesidad de hacer trámites ni dar aviso a las autoridades. Sin embargo, los que quieran pintar un “cajón” en la entrada a su garaje, tendrán que gestionar un permiso en la sede comunal que corresponda a su domicilio.

Para pedir esta autorización hay que presentar una carta indicando el nombre y el correo electrónico del solicitante y la dirección del inmueble. También una foto del frente de este, donde se vea la entrada de la cochera o subida del garaje y parte de la calzada. Además, hay que llevar DNI (original y fotocopia) y el título de propiedad o el contrato de alquiler del inmueble. Los permisos para demarcar la cochera de un edificio deberán ser solicitados por la administración del consorcio. Y si el inmueble es un PH, podrá hacerlo el dueño de cualquiera de sus unidades.

La Comuna va a generar un expediente electrónico y, después de evaluar la solicitud, se le avisará por mail al interesado si fue aprobada o rechazada. Si fue confirmada, también le enviarán un plano o fotomontaje indicando cómo se debe pintar el cordón y la demarcación amarilla del “cajón”. A partir de la notificación, el vecino tendrá 60 días para hacer el trabajo. Si no cumple con este plazo, deberá volver a solicitar el permiso.

El “cajón” deberá ser demarcado de esta manera: el vecino tendrá que pintar dos líneas perpendiculares al cordón de 1,5 metros de largo por 10 centímetros de ancho, a 50 centímetros de cada lado de la entrada, desde la finalización de la bajada del garaje. También habrá que trazar una línea de 10 centímetros de ancho paralela al cordón, uniendo las dos perpendiculares.

El vecino o el consorcio de propietarios que pinte un “cajón” sin permiso será sancionado con multas de 300 a 2.000 unidades fijas. Con el valor actual de la UF, que es de $ 17,85, esto equivale a entre $ 5.355 y $ 35.700.

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