Los propietarios (adultos mayores) decidieron salir del negocio. Los compró un empresario argentino con experiencia en Ecuador. ¿Qué pasará con la sala de Rivera Indarte y Rivadavia?
En noviembre de 2010, cerró el Atlas Lavalle. En mayo del año pasado, bajó las persianas el Atlas Santa Fe. Y, ahora, el ex operador de ambos complejos se despidió para siempre del negocio. La marca Atlas Cines, que tiene salas en Patio Bullrich, Alto Avellaneda y el barrio de Flores, cambió de dueño. Fue comprada por un empresario argentino llamado Martín Schwartz . El nuevo propietario tiene experiencia en la exhibición, ya que desarrolló la cadena de cines Supercines en Ecuador, donde es uno de los referentes más importantes de la industria. Sin embargo, en el caso de Atlas, la inversión será a título personal.
La venta de la cadena, adelantada por el sitio cinesargentinos.com, habría sido por un monto bajo. “Lo más valioso de Atlas son sus ubicaciones , la marca en sí no tiene mucho valor”, explicaron en
Desde SAC, la empresa de las familias Cordero, Carballo, Lautaret y Ortiz que era dueña de los cines Atlas, confirmaron que se irán totalmente del séptimo arte: el Atlas de Lavalle se convirtió en un templo evangélico, el de Santa Fe será acondicionado para ser un local comercial –posee una superficie de 1.800 metros cuadrados– y el Gaumont (que es de ellos pero hoy alquila el INCAA, en Rivadavia, a metros del Congreso) también dejará de ser cine si el Estado lo abandona.
La llegada a Schwartz a las pantallas locales se da en un momento favorable. Hasta julio pasado, se vendieron 30 millones de entradas, una de las cifras más altas de los últimos 20 años, aunque el cine de nuestra Rivera Indarte a metros de Rivadavía venía en picada en facturación.
La participación de mercado de Atlas es baja, alcanza a cerca del 2% del total nacional, sobre todo en comparación con competidores como Cinemark y Hoyts –las mayores cadenas, que están en proceso de fusión–, Village, Showcase, Cinemacenter o Sunstar.
Una parte de la línea gerencial que venía encargándose de Atlas Cines seguirá en el manejo de la empresa en esta nueva etapa, según comentaron allegados. Con fondos frescos, su aspiración es renovar las salas en Patio Bullrich y hay conversaciones con IRSA –la dueña de los espacios que ocupan los proyectores en ese shopping y también en el Alto Avellaneda– para ir en la misma dirección.