(Barrio de Flores) “Si vuelvo a nacer quisiera vivir la misma locura. Quiero vivir lo que he vivido. Quiero llorar lo que lloré. Quiero perder lo que he perdido y también quiero encontrar lo que encontré”. Cacho Castaña lanzó en 2003 “Yo si vuelvo a nacer”, canción que forma parte de su álbum Café La Humedad y que, si se repasa su carrera y su historial amoroso, se comprende la profundidad de la letra que escribió en aquel entonces.
Este jueves 11 de junio el músico de Flores hubiera cumplido 78 años y su mujer, Marina Rosenthal decidió rendirle un emotivo homenaje. Esta noche, a partir de las 22 horas, se podrá ver un show de los músicos y bailarines de Café La Humedad a través de las redes sociales del mítico bar teatro y también desde el canal de YouTube del músico.
“Desde que lo inauguró, siempre celebraba su cumpleaños ahí. Hacíamos fiestas grosas. Ambientábamos el lugar, invitábamos a todos sus amigos, había un catering. De todo. Y yo como a Cacho lo siento muy vivo, me parecía raro no festejarle el cumpleaños. Él lo estaría festejando”, contó a Teleshow quien fuera su última mujer.
“Además, para los músicos y bailarines del local es una fuente de trabajo, en medio de la pandemia. Se dieron varias cosas y me parecía un buen motivo”, continuó quien está a cargo del local y quien confeccionó el repertorio que sonará en el homenaje a Cacho.
—También habrá videos de famosos saludando a Cacho.
—Sí, me pareció que para que no fuera muy largo el show, entre canción y canción que aparezca algún amigo que lo quiera saludar. No le pedí a todos porque son un montón. Lo mismo me pasó con los temas. Además, tampoco quería molestarlos.
—¿Seguís en contacto con sus amigos?
—Sí, son mis amigos. Hemos compartido mucho con Palito Ortega y Evangelina Salazar, Alejandro Lerner, Adriana Varela, Nacha Guevara, Coco Sily.
—¿Va a estar el saludo de Susana Giménez?
—La llamé, le pedí el video y hablamos un largo rato. Pero esa misma noche sufrió el accidente doméstico en su casa de Punta del Este. Así que le dije: “Despreocupate”. A Cacho le ha pasado que no se sentía en condiciones de hacer nada. Me pongo en el lugar cuando le pasaba a él y la entiendo.
—Además de ver la transmisión en vivo, ¿cómo vas a festejar su cumpleaños vos en tu casa?
—El día que Cacho cumplía años mi casa era una fiesta. Compraba globos… tampoco soy loca de ir a comprarlos ahora. Creo que la mejor manera es disfrutar. Tratar de estar contenta este día y no ponerme triste. Ver el recital con alegría. Es lo que a él le gustaría.
—¿Cómo llevás estos casi siete meses sin él?
—Mirá… yo creo que depende mucho de cada persona. Yo no soy de llorar mucho públicamente o al lado de alguien. Soy más de tener mis momentos, pero busco tenerlos sola, cuando tengo que ponerme triste. A veces, ponerme triste, es raro porque me pone de mal humor, me enojo. No con él, sino que me enoja la situación. Entonces, cuando me pongo muy triste trato de aislarme porque no me gusta que me vean así.
—¿Cómo lo recordás?
—En realidad, tengo momentos de ausencias. Lo tengo súper presente, 7×24, y los momentos estos en que tengo una ausencia, son situaciones como por ejemplo: estar tirada en la cama y mirar el baño. A mí me encantaba mirarlo de espaldas cuando se estaba peinando. Entonces, mirar el baño y ver que no está ahí parado, y extrañar esa situación. Extraño situaciones que me pasan en el día y ahí son los momentos donde me pongo triste y tal vez busco recluirme. Lo tengo muy presente. Lo que me enoja es el paso del tiempo.
—¿En qué sentido?
—Porque el tiempo sigue y te va mostrando su ausencia. Quiero que pare todo, para no sentir más su ausencia.
—¿Seguís viendo sus videos y escuchando sus canciones?
—Como estoy a cargo de Café La Humedad estoy todo el tiempo viendo cosas de él. Me hace bien. También me subo al auto y tengo sus discos puestos. Sobre todo porque ahí escuchábamos juntos sus temas. Incluso los temas que ya no cantaba en sus recitales.
—¿Cuál, por ejemplo?
—Él amaba “Buenos Aires Lado B”. Escucho todos sus temas y no me hacen mal. Me hacen re bien.
Al finalizar la entrevista que brindó por primera vez desde que murió Cacho Castaña -el 15 de octubre de 2019-, Marina Rosenthal enfatiza en que siente que el músico está vivo. “La palabra ‘recuerdo’ todavía no me entró. Para las situaciones límites soy muy pensante, muy racional. Trato de tener tranquilidad para no perder el control”.
Humberto Vicente Castagna -tal era su verdadero nombre- y Marina Rosenthal comenzaron su relación en 2014 y dos años después, en 2016, se casaron en una ceremonia que dirigió el Jefe de Gobierno Porteño, Horacio Rodríguez Larreta. La fiesta fue nada más ni nada menos que en Café La Humedad.
“Siempre amé, pero es la primera vez que me sobrepasa lo que me devuelven del otro lado. Me siento amado. Quizás antes no me di cuenta de que me amaban o no me amaban pero a los 74 años, esto recién empieza”, decía el músico sobre la unión que celebró con su pareja, una psicóloga marplatense 34 años menor. “Solo pensé que ella se merecía que le propusiera ser mi esposa”. La luna de miel fue en Chascomús. Según contó su mujer en aquel entonces, “Cacho eligió ese lugar para ir a pescar”.
Quienes conocieron la relación que tenían Cacho y Marina sostienen que su mujer fue el gran pilar en la vida del músico del barrio, y quien estuvo a su lado hasta el último momento. “Marina ha sido una gran compañera. No he visto nunca una compañera así, ha estado a su lado en todo momento con un amor, una esperanza y un cariño… No se ha movido de ahí. Tener a esa mujer fue una bendición para Cacho”, destacó Nacha Guevara a Teleshow el día que murió el músico. NR