El gobierno porteño anunció este miércoles una reforma del diseño curricular del nivel inicial para las salas de 4 y 5 años, ambas obligatorias. El nuevo diseño entrará en vigencia en 2025 y, según dijeron las autoridades, tendrá un mayor énfasis en Lengua y Matemática, de manera de fortalecer la preparación de los chicos y su “transición” a primer grado. También se anunció que “por primera vez” habrá un trabajo coordinado con una “mirada integral” entre los ministerios de Desarrollo Humano y Educación.
Como parte de ese abordaje “integral”, las autoridades porteñas también indicaron que se abrirán cinco Centros de Primera Infancia (CPI): el “Juanito Bosco” y el “Quinquela Martín” (ya inaugurados) en La Boca, el “Corazones Felices” en el Barrio 31 (se abre en octubre), el “Sembrando Esperanza” en Bajo Flores (previsto para noviembre) y el CPI de pedagogía inclusiva en Barracas (también para noviembre). Desde el Gobierno porteño aseguraron que así sumarán 500 vacantes y llegarán a 15.000 en los 80 CPI que tiene la ciudad. Además, anticiparon que a partir de ahora la inscripción para estos centros será online.
Estos anuncios fueron anticipados a la prensa en una convocatoria encabezada por el jefe de Gobierno, Jorge Macri, y la vicejefa, Clara Muzzio. También participaron los ministros Mercedes Miguel (Educación) y Gabriel Mraida (Desarrollo Humano y Hábitat). Como en otras provincias, CABA ofrece dos tipos de propuestas para la primera infancia (de 45 días a 3 años): por un lado, los Centros de Primera Infancia (CPI), que dependen del Ministerio de Desarrollo Humano y Hábitat; por otro lado, las salas maternales (de 45 días a 2 años) y la sala de 3 de nivel inicial, que forman parte del sistema educativo y dependen del Ministerio de Educación.
“Por primera vez habrá un trabajo articulado entre Desarrollo Humano y Educación respecto al abordaje de la primera infancia”, afirmó Macri. Y explicó: “Lo que ocurre en esta etapa de formación define muchas de las capacidades futuras de desarrollo”. El jefe de Gobierno consideró que la inauguración de nuevos CPI es una de las principales “políticas de género”, dado que “para las mujeres, la primera razón de abandono de los estudios -secundarios y universitarios- es la maternidad”.
El ministro Mraida destacó también “la flexibilización de la jornada y la modalidad de los CPI”, para “adaptarlos a la rutina de cada familia”. Hasta ahora, la oferta era de 8 horas diarias; ahora las familias podrán optar por 4, 6 u 8 horas, y contarán con horarios nocturnos además de diurnos. También enfatizó que trabajarán en la formación del personal para alentar la detección temprana de dificultades, relacionadas por ejemplo con cuestiones de atención o el uso de pantallas.
“Hoy, 2 de cada 10 chicos en las aulas tiene trastornos de aprendizaje. Ese diagnóstico empieza en la primera infancia”, afirmó Muzzio.
Con respecto a los cambios curriculares en salas de 4 y 5 años, Macri señaló que “se conectan con el cambio curricular en la primaria”, donde también se pondrá mayor foco en Lengua y Matemática a partir de 2025. Mercedes Miguel destacó que a partir de 2025 habrá “objetivos de logro” específicos para estas áreas en salas de 4 y 5. Además, tendrá fuerte presencia el trabajo sobre el “bienestar socioemocional”. El currículum anterior era de 2019, es decir que permaneció vigente durante una sola gestión de gobierno.
Para acompañar el nuevo diseño curricular, el gobierno porteño también entregará materiales a los jardines estatales y privados, incluyendo 1.250 kits de un juego denominado “Jugamos con palabras” y 21.600 cuadernillos homónimos para los alumnos de sala de 5. Las propuestas se orientan al desarrollo de la conciencia fonológica, considerada una habilidad “precursora” necesaria para lograr una alfabetización plena en el primer ciclo de primaria.
“La sala de 5 es un momento de transición y una instancia clave para la alfabetización. Estamos tendiendo un puente para que el niño en sala de 5 esté preparado para primer grado”, señaló la ministra Miguel. Como parte de la preocupación por la “transición” de los alumnos de un nivel a otro, las autoridades anunciaron que las maestras de sala de 5 deberán completar un nuevo informe de evaluación de cada estudiante para que las docentes de primer grado sepan en qué condiciones llegan los alumnos con respecto a los saberes de Lengua y Matemática.
En el nivel inicial, la Ciudad de Buenos Aires tiene 30.112 alumnos en sala de 5 años, 26.392 en sala de 4 y 18.384 en sala de 3. Otros 16.569 alumnos asisten a los jardines maternales (de 45 días a 2 años). Las autoridades subrayaron que “en la Ciudad no faltan vacantes” en los jardines y aseguraron que la tasa de cobertura es del 100% en las tres salas (aunque la de 3 no es obligatoria).
También negaron que existan diferencias de calidad entre las propuestas de los jardines de infantes y de los centros de primera infancia. “Hay mucho prejuicio con respecto a los CPI”, afirmó el jefe de Gobierno. Mraida aseguró que incluso muchas familias prefieren enviar a sus hijos de 3 años a un CPI antes que al jardín. Miguel explicó que el Ministerio de Educación tiene un área de primera infancia que “supervisa” a los CPI. Macri sintetizó: “Queremos que sean sistemas lo más parecidos posible”.
Las autoridades porteñas informaron que habrá capacitaciones para todos los docentes de salas de 4 y 5 años en el nuevo diseño curricular en diciembre, febrero y durante todo el año próximo.