En el espacio que actualmente ocupa la Plaza Dúo Gardel-Razzano, se levantaba la fábrica de chocolates Suchard, la misma que los vecinos añoran porque traía los aromas de las recetas de origen suizo que allí se fabricaban. Ubicada en la calle Lautaro 860, entre la calle Primera Junta y la autopista 25 de Mayo, era una edificación de dos pisos y un subsuelo que tenía varios turnos de trabajo que hacían el deleite del barrio.
Si bien no había otra que elaborara chocolates en las proximidades, no era la única fábrica de delicias de la que podía jactarse la zona, ya que varias plantas de producción aromatizaban el aire. Una de ellas era la de Royal, en la avenida Asamblea al 1100, frente al Parque Chacabuco. Su edificio alberga hoy a una cadena de supermercados y impregnaba los alrededores con los aromas frutales a cereza, frutilla, durazno, entre otros, de sus gelatinas, o a vainilla y chocolate de sus postres y flanes. Otra de las más recordadas era la fábrica de galletitas El Orden, en Carabobo al 100, que era conocida por sus bizcochos.
En cuanto a la fábrica Suchard, permaneció en el barrio hasta fines de los 70, luego se mudó al barrio porteño de Villa Soldati, al 3200 de la avenida Coronel Roca. Esta segunda planta fue inaugurada en 1982, funcionó durante más de 20 años y llegó a ser una de las fábricas de chocolate más importantes de América del Sur. Allí se elaboró, a partir de 1984, el icónico alfajor Suchard, que rompió el molde y se convirtió en un verdadero boom, alcanzando récords de ventas al reemplazar el típico relleno de dulce de leche de los alfajores por una deliciosa mousse de chocolate.
Cabe recordar que la reconocida marca de origen suizo había nacido en la ciudad de Serrières en 1826, fundada por el pastelero Philippe Suchard. Este levantaría un verdadero imperio del chocolate que se haría famoso en manos de sus descendientes por las marcas Milka, creada en 1901, y los caramelos Sugus, lanzados en 1931, entre otros productos que continúan hasta el día de hoy.
En la Argentina, para 2005, la planta Suchard ya se había mudado a la zona de General Pacheco, en el Gran Buenos Aires, en tanto que el edificio de la avenida Coronel Roca fue comprado por el gobierno de la Ciudad. El mismo tenía unos 25.000 metros cuadrados cubiertos y poco después se estableció allí el primer parque industrial de la Ciudad, el denominado Centro Industrial Sur, que comenzó a operar en noviembre de 2006.

Usurpación y desalojo
En cuanto a la fábrica de la calle Lautaro, luego de ser expropiada por el Estado en la época en que Osvaldo Cacciatore fuera intendente de la ciudad (1976-1982), fue ocupada por unas 65 familias, aproximadamente unas 400 personas, durante 20 años. Según cuenta Roberto D’Anna, presidente del Museo Barrio de Flores, a partir de una carta que él mismo recibió por parte de un grupo de vecinos del barrio, los ocupantes vivían en condiciones inhumanas y de hacinamiento.
“Utilizaban un sótano gigante como cloaca, que contenía miles de litros de aguas servidas, situación agravada por el riesgo de derrumbe del edificio. El problema sobrepasaba los límites del predio, ya que nosotros, los vecinos, nos veíamos imposibilitados de combatir las plagas, por los focos infecciosos presentes en el lugar. Cansados de las plagas y los olores nauseabundos, un grupo de vecinos decidimos hacer algo, y junto a los pobladores del asentamiento, comenzamos a reunirnos para encontrar una solución”, dice el texto del escrito comunitario facilitado por D’Anna a LA NACIÓN.
Los vecinos redactaron una carta destinada a las autoridades municipales y se encargaron de juntar firmas en el barrio con el objetivo de encontrar una solución.
La demolición del edificio en diciembre de 2004
Finalmente, en diciembre de 2004, y tras un año y medio de negociaciones entre los vecinos y funcionarios del gobierno porteño, la edificación fue desalojada de forma pacífica. En ese momento, las familias pudieron acceder a un subsidio o a un crédito con facilidades para resolver el problema de vivienda. Pocos días después comenzaron las obras de demolición ante el peligro de un colapso.
El papa Francisco avanza en su recuperación y sigue su tratamiento bajo observación médica
El esperado espacio verde
A pesar de la promesa de un espacio verde en el sitio donde se había demolido la ex fábrica Suchard, pasaron varios años hasta su inauguración. La flamante plaza recién estuvo lista para 2007. “Aunque hoy un cartel no lo recuerde, los vecinos bautizaron a la plazoleta como Dúo Gardel-Razzano. José Razzano era vecino de Flores. Su casa de Bonorino 777 era frecuentada por Carlos Gardel”, explica el presidente del Museo Barrio de Flores.
El nombre de este espacio recreativo recuerda al exitoso dúo que conformaron ambos artistas entre 1911 y 1925, año en que Razzano debió abandonar el canto por problemas en sus cuerdas vocales. Juntos realizaron numerosas presentaciones a sala llena en los principales teatros porteños, y su arte quiso ser evocado por los vecinos en esta plaza emplazada donde se alzaba la fábrica de chocolates que aún provoca recuerdos.
“El aroma de la fábrica es inolvidable, era un placer caminar cerca los días de semana cuando hacían la producción, un recuerdo imborrable para los vecinos”, dice Susana, que vive a unas pocas cuadras.
La actual plazoleta donde antes estaba la fábrica
En cuanto a la marca Suchard, en los 90 pasó a ser parte de Kraft Foods, que tiempo después cambió su denominación por Mondelēz Internacional. En 2013 volvió a lanzar el recordado alfajor relleno con mousse de chocolate con gran éxito, aunque en la actualidad ya no se produce. En cuanto a los Sugus, en los 2000, Arcor adquirió la licencia de su elaboración y actualmente los produce en su planta de Arroyito, Córdoba. Estos caramelos continúan como una de las golosinas preferidas por el público.