El Gobierno de la Ciudad lanza un paseo turístico gratuito para recorrer la vida del Papa. A pie o en bus, el tour incluye visitas a sitios de importancia en la vida del Papa Francisco. Flores de Papel estuvo presente en el tour inaugural.

El punto de partida es la basílica de San José de Flores, ahí sobre Rivadavia, enfrente de la plaza. Y no por casualidad: es un lugar de referencia en el barrio en que creció. Y fue en el primer confesionario sobre el ala izquierda donde ocurrió la revelación que le cambiaría la vida. Corría la primavera de 1953, y antes de irse con sus amigos a festejar el Día de los estudiantes, Jorge Bergoglio decidió darse una vuelta por la basílica para rezar y confesarse. Durante esa confesión, inesperadamente, recibió el llamado divino, esa primera inspiración que lo llevaría luego a consagrase a la vida religiosa. Ese día, el picnic y los amigos quedaron para otra ocasión y Bergoglio se fue derecho a su casa para meditar sobre lo sucedido.
La anécdota la cuenta Soraya Chaina, guía turística desde hace 23 años, en la puerta de la basílica, el primero de los 24 atractivos que forman parte del Circuito Papal, un tour en ómnibus organizado por el Ente de Turismo de la ciudad y la Dirección General de Cultos, que propone recorrer distintos puntos de Buenos Aires para conocer la vida y acción pastoral del papa Francisco y que a partir de este mes estará disponible para el público en general, y en forma gratuita.
El primer sábado de mayo, al cierre de esta edición, Flores de Papel fue invitado por el Director Comunal Dr. Guillermo Peña, para el tour inaugural. A las tres de la tarde, ya estaba estacionado frente a la basílica el ómnibus blanco con la imagen de Francisco en sus laterales. Luego de unos minutos, el bus comenzó su marcha.
Una vez arriba del ómnibus el primer punto a visitar fue la casa de la infancia de Bergoglio, en el barrio Bonorino, de Flores. Quien estaba del lado izquierdo del ómnibus tuvo la suerte de observar la flamante placa colocada en la puerta que da cuenta de que ahí creció junto a sus padres y sus cuatro hermanos menores quien hoy ocupa el trono de Pedro. Explicaron también parte de la historia del barrio de las “Casitas Baratas”, de la cual el Papa Francisco, hoy es su principal embajador.
Antes de salir de Flores se pasó por delante de la Plazoleta Herminia Brumana, donde Francisco jugaba a la pelota con sus amigos, o la Escuela Coronel Cerviño, donde realizó sus estudios primarios, o la Vicaría de Flores, sobre la calle Condarco, donde llegaría en 1992 luego de ser ordenado obispo y nombrado vicario episcopal.
Pero el tour y las explicaciones de la guía no se restringieron solamente a la vida y obra del Papa. También contó anécdotas de los barrios, como cuando del centro a Flores (en ese entonces una zona de quintas) se tardaba dos días en carreta, o anécdotas sobre don Antonio Devoto, el fundador de ese barrio donde Bergoglio desembarcó a los 22 años cuando ingresó al Seminario Metropolitano de Buenos Aires, situado en la calle José Cubas, y al que decidiría luego dejar para ser jesuita e iniciar el noviciado en Chile.
La primera parada del recorrido fue la parroquia San José del Talar, donde se encuentra el Santuario de la Virgen Desatanudos, esa que se montó luego de que Bergoglio permitiera la colocación de una imagen de esa virgen. Ahí, Chaina recordó que quienes lo visitan por primera vez pueden pedir tres gracias.
El recorrido tuvo su siguiente parada en la Plaza de Mayo, donde se visita la Catedral Metropolitana y el Arzobispado de Buenos Aires, lugar donde Francisco vivió y trabajó hasta su designación como Papa. El circuito arriba del ómnibus continuaría por el barrio de Balvanera y Almagro, para observar sitios tan disímiles como el Colegio del Salvador, donde Bergoglio fue profesor de literatura y filosofía en la década del 60; la peluquería Romano, de la que era cliente o la cuadra donde tuvo origen el club de sus amores, San Lorenzo de Almagro. Finalmente, el circuito concluyó en el mismo punto donde arrancó: en la basílica.
“El turismo religioso es una actividad que moviliza a millones de personas en todo el mundo y su patrimonio representa una de las principales riquezas de la ciudad. Se estima que alrededor del 25% de los viajeros a nivel mundial se manifiesta interesado por el turismo religioso. La asunción del nuevo Papa será un motivo que reforzará la decisión de visitar la ciudad de Buenos Aires por turistas del mundo entero”, aseguró el ministro de Cultura porteño, Hernán Lombardi, que fue parte del tour inaugural.
Para todos los vecinos interesados, el tour papal –en micro– funciona los sábados, domingos y feriados, de 9 a 12 y de 15 a 18. Previamente hay que inscribirse por mail a circuitopapal@buenos aires.gob.ar o llamar al 4114-5791.
Se suma además dos visitas guiadas gratuitas, pero a pie: la de una hora y media por el barrio de Flores, todos los jueves, que parte de la basílica de San José de Flores, y otra, en la Plaza de Mayo, que tendrá lugar todos los martes y que tiene su punto de partida en la Catedral Metropolitana. Aunque a diferencia del tour con bus, estas dos se suspenden por lluvia.