Así fue la colecta del instituto San José de Flores para su viaje misional

Desde hace 35 años el Instituto San José de Flores viene realizando un viaje misional y de asistencia a la zona de la Puna, más precisamente al Oeste de La Quiaca, visitando hoy en día 11 colegios. El mismo fue una propuesta de la Gendarmería Nacional para apadrinar escuelas de frontera en el año 1979. Cabe destacar que nuestro colegio es uno de los 2 que lo continuaron haciendo ininterrumpidamente hasta la actualidad.

(Barrio de Flores) El instituto San José de Flores realiza desde 1979, viajes a la frontera en los que apadrina escuelas de la puna. El viaje se sustenta con la colaboración desinteresada de todas las familias del colegio y con donaciones del resto de la comunidad y numerosas empresas.

Todos los eventos que se realizan para este fin son dedicados exclusivamente a los colegios de la Puna y sus microemprendimientos, es decir que lo recaudado es entregado a ellos en su totalidad.

Las escuelas que se visitan son: CASIRA , Santa Catalina, La Cruz, Piscuno, El Angosto, Cabrería, San Francisco, Cieneguillas, La Ciénaga, Oratorio y Timón Cruz.

Las actividades que se realizan son esencialmente solidarias y de asistencia (se llevaron este año cerca de 2.800 bultos con diferentes mercaderías como ser alimentos, ropa, útiles escolares, juguetes, colchones, mantas, filtro de agua, medicamentos, semillas, elementos para sala de primeros auxilios, plásticos para invernaderos, etc.). Y de intercambio y recreación con los alumnos de las escuelas. En los colegios en los que están más tiempo se realizan actividades pastorales como: clases de catequesis, celebraciones, alguna obrita de títeres con mensaje evangelizador.

En esta oportunidad el viaje misional XXXV realizó la carga del camión el día jueves 26 de septiembre. Y todo el contingente, integrado por los alumnos de 4to. año, docentes, directivos, padres y exalumnos, partió el viernes 27 de septiembre y está regresando el día lunes 7 de Octubre.

Para recaudar el dinero para el viaje los estudiantes realizaron desfiles, bailes, obraron de mozos en eventos del colegio, vendieron tortas y cuadernos diseñados y elaborados por ellos, para recaudar fondos. Se capacitaron y prepararon para hacer magia, teatro, juegos recreativos, actividades pastorales.

El sueño y la misión se están cumpliendo. Viajaron y dejaron en cada rincón de la Puna un camión repleto de donaciones. Y regresan trayendo los corazones repletos de afectos, enseñanzas y recuerdos para toda la vida.

El lema de este viaje misional XXXV es “MISIONAR ES DAR, DAR ES RECIBIR”.