(Barrio de Flores) Después de la irritación y la impaciencia ante colas interminables para pagar facturas e impuestos -sólo una fracción de locales está disponible, aquellos que funcionan en comercios cuya actividad se consideró exceptuada- la presión se hizo sentir.
El titular del Banco Central, Miguel Pesce, ya confirmó que las agencias de cobro extrabancario, que se encuentran bajo su órbita regulatoria, levantarán las persianas la semana que viene. Si bien la medida aún no es oficial, será tratada por el directorio de la entidad en su reunión de este jueves.
Una señal en este sentido ya la había dado el miércoles el Ministro de Salud, Ginés González García, durante una videoconferencia con el Senado, cuando sorpresivamente atendió una llamada ante la pregunta de una legisladora. “Pido disculpas, pero era el Presidente que me estaba pidiendo que le actualice los protocolos para Rapi Pago, Pago Fácil y todo eso. Les pido disculpas pero tengo que salir corriendo”.
En la industria, de todos modos, no quieren albergar demasiadas expectativas. No hay nada por escrito todavía y falta el protocolo sanitario, explican.
En principio, lo que se estaría barajando es que esta reapertura de más de 20.000 locales en todo el país se haga en forma escalonada o progresiva y con un sistema de turnos similar al implementado en los bancos, con un cronograma según la terminación del DNI, que requeriría ingresar a la página web de cada empresa. Además se baraja establecer un tope a la cantidad de facturas o impuestos por individuo.
Hoy empresas como Pago Fácil o Rapipago solamente están operando a través de agentes minoristas cuya actividad principal se encuentra exceptuada. A nivel industria, sobre el universo total de locales que suelen atender al público, sólo el 30% está funcionando.
“Hicimos reiteradas presentaciones en el Banco Central, en la ANSES y en el Ministerio de Acción Social. Nuestra intención es que se descomprima la atención en los bancos”, explicó Maximiliano Babino, gerente general de Pago Fácil/ Western Union a Clarín. “Pero también ofrecemos nuestra red para el pago de subsidios y jubilaciones, hacerlo sin cargo. Pero ahí no hemos tenido respuesta todavía”, reconoce.
Lo cierto es que, aún sin estar exceptuados por la emergencia de eventuales cortes, muchos vecinos, sobre todo personas mayores, simplemente dejaron de pagar al no tener abierto el negocio de la esquina donde acostumbraban ir. Y, ante el corte, se vieron obligados a hacer horas de colas en algún otro lugar. NR