(CABA)Cien pastillas de éxtasis, algunas con el símbolo de la cruz esvástica y otras con las caras las Tortugas Ninja, fueron halladas por la policía en la casa de Osvaldo Rodríguez, el joven de 24 años asesinado a puñaladas y arrojado desde una camioneta en el barrio de Caballito, el domingo a la noche. Tras el allanamiento, la investigación se orientó hacia la hipótesis de un crimen relacionado con la venta de esa droga de diseño. Fuentes cercanas al caso informaron que “además de las pastillas encontradas, se peritó el teléfono. Por eso sabemos que estuvo comunicado hasta minutos antes del homicidio, y todo apunta a la comercialización de drogas”.
El allanamiento ordenado por el juez Manuel Gorostiaga fue realizado en el departamento donde vivía Rodríguez, sobre la avenida Avellaneda al 1800, a la vuelta de donde murió tras ser arrojado desde una camioneta Renault Kangoo que circulaba por la calle Aranguren.
Durante el operativo, que llevó adelante la División Homicidios de la Policía de la Ciudad, se encontraron las 100 pastillas: algunas grabadas con el símbolo de la cruz esvástica y otras, la mayoría, celestes y con la forma de la cara de Michelangelo, Leonardo, Raphael y Donatello, los personajes de las Tortugas Ninja.
Los investigadores creen que las pastillas pueden ayudar a desenredar el caso y aportar datos que permitan saber quién era el proveedor de la víctima o quiénes eran sus clientes para determinar si alguno de ellos está relacionado al hecho. “Los dealers compran cada pastilla de éxtasis a un valor que oscila entre los 95 y 100 pesos y luego las venden en la puerta de boliches de música electrónica a entre 280 y 300 pesos”, explicaron.
Otro dato que sumaron los detectives fue que la madrugada del 26 de marzo, alrededor de la 1.45, Rodríguez fue detenido por tenencia de drogas por policías de la comisaría 23 de Palermo, cerca el boliche Crobar, sobre avenida Freyre e Infanta Isabel.
Si bien no informaron qué tipo de drogas ni la cantidad que tenía Rodríguez el día en que lo detuvieron, fuentes de la División Precursores Químicos de la Dirección de Narcocriminalidad de la Policía de la Ciudad revelaron que la primera vez que fueron incautadas pastillas con la cruz esvástica fue el 25 de mayo último cerca del boliche Crobar, a metros del Rosedal, cuando se realizó un show el DJ alemán Chris Liebing. La misma zona donde fue detenido el joven.
Esa fue la primera vez que se secuestró la pastilla con la esvástica. “No estaba en el catálogo internacional de logos de las píldoras”, explicó un jefe policial del área de Narcocriminalidad.
El fiscal de instrucción a cargo de la causa, Martín Niklison, y los investigadores policiales barajan entre sus hipótesis: la venganza o una deuda por la venta de drogas.
“Le compraron droga y se negaron a pagarle o tal vez alguien tenía una deuda con él o él con alguna persona. Hizo llamadas desde el celular hasta antes de que lo mataran. Todo ocurrió en un minuto, lo levantaron en la camioneta y lo tiraron apuñalado a las tres cuadras”, explicó una fuente cercana al caso, quien aclaró que “junto al cuerpo se encontró un portacuchillo, que él usaba, pero no el cuchillo, y quizás sea el mismo que usaron para matarlo”, detalló el investigador.
Hasta el momento, en la causa caratulada como averiguación de homicidio, el operativo de rastrillaje para dar con los ocupantes de la Kangoo blanca, así como el análisis de las distintas cámaras para identificar la patente de la camioneta no arrojaron ningún resultado. Sin embargo, tras el desconcierto inicial, cuando los investigadores se encontraron con un cuerpo apuñalado arrojado a la calle y sin señales de robo, la investigación parece haber encontrado un rumbo.
El homicidio de Rodríguez fue cometido el domingo pasado y se descubrió luego de que un vecino llamó al 911 para informar sobre movimientos sospechosos en una camioneta utilitaria, en la avenida Donato Alvarez al 400.
SN
Fuente: Página 12