Se acaba de publicar un libro sobre la vida y el mensaje del Papa Francisco, desde su infancia en el barrio de Flores, en Buenos Aires, hasta el Vaticano. Se trata de la primera publicación para chicos sobre el sumo pontífice.
(CABA) Desde la primera página del libro “Las enseñanzas de Francisco”, de Federico Böttcher Sorondo (Ediciones B, Colección B de Block), el lector puede percibir una fiel muestra de qué le espera al continuar su recorrido.
“Carta a una niña” se titula el prólogo, y allí uno se encuentra precisamente con esa magnífica carta que podría considerarse un libro en sí misma, ya que resume -de manera formidable- prácticamente todas “las enseñanzas de Francisco”.
La carta en cuestión fue escrita por Jorge Bergoglio pero más de medio siglo antes de ser elegido Papa, cuando todavía no tenía 25 años. Dirigiéndose a su hermana María Elena, 12 años menor, el entonces estudiante le pide a la pequeña que lo ayude con la oración para que su “campo de apostolado fructifique”, pues allí en Chile, donde avanzaba como seminarista y daba clases de catequesis, sus alumnos “son muy pobres y lo peor de todo es que no conocen a Jesús”.
En una docena de párrafos, uno puede descubrir claramente al mismo hombre que el 13 de marzo de 2013 fue elegido para ocupar el trono de Pedro, e inmediatamente sorprendió al mundo por su ejemplo de humildad y sencillez.
Pero, ¿de dónde vino este hombre? Ésa es la pregunta que pretende responder la primera parte del libro (“Su vida”), que desde un enfoque biográfico hace un recorrido por su familia, sus estudios y su vocación; una historia que comienza en Italia, precisamente en el Piamonte donde nacieron sus antepasados, y finaliza muy cerca de allí, en el Vaticano.
A lo largo de todo este segmento se destaca en forma subyacente su ejemplo de vida, mostrando la coincidencia entre palabras y hechos, lejos de toda hipocresía.
La segunda mitad (“Su mensaje”) se zambulle directamente en las enseñanzas del título y repasa -entre otros temas- sus referencias a la alegría, la solidaridad, la caridad, el trabajo, la misericordia, la honestidad y el servicio a los demás. Pero no lo hace solamente con las contundentes palabras de sus primeros meses de pontificado, sino yendo hacia atrás y trayendo a la luz muchas homilías, unas pocas entrevistas y numerosos libros, especialmente aquellos escritos por él mismo.
En cada una de esas fuentes uno puede encontrarse con el convencido llamado a las personas a buscar el camino de la salvación a partir del servicio a los demás. Y allí podemos ver y entender que el Papa Francisco acentúa y amplifica lo que ya venía diciendo el padre Jorge.
Francisco para todos
Las 182 páginas de esta obra son realmente de lectura muy ágil, a partir de palabras simples y con una estructura de capítulos cortos y concisos, encabezados por atractivos subtítulos. A esto se le suman los anexos de curiosidades para complementar la lectura,que pueden ayudar al lector a contextualizar y entender mejor diferentes situaciones.
De este modo, cada uno puede optar por el nivel de profundidad que desee en su recorrido, y esto lo hace accesible para todas las edades. Como detalle adicional, posee algunas ilustraciones para graficar conceptos o situaciones salientes y complementar la lectura.
El autor hace también su aporte personal para la explicación de los mensajes del Papa argentino, y pese a su lenguaje sencillo se propone provocar reflexiones profundas.Por su variedad de concepto y la gran cantidad de temas que recorre, está claro que cada lector puede tomar para sí alguna enseñanza concreta, algún ejemplo que pueda aplicar a su vida diaria.
Por su estilo franco y diseño amigable, el libro se adapta perfectamente a diferentes situaciones, de modo que por ejemplo los docentes puedan utilizarlo como material de estudio o de apoyo para la catequesis, los niños más pequeños puedan leerlo de a poco con ayuda de sus padres, los más grandes puedan leerlo solos y los adultos “no-lectores” vuelvan a amigarse con el placer de leer, descubriendo a la vez la grandeza de un hombre que estuvo tantos años en nuestras calles prácticamente sin que nos diéramos cuenta.
Un Papa más humano
Otra de las virtudes de esta obra es que logra “humanizar” al Santo Padre, para que más de uno pueda sentirse identificado en él. ¿Cómo lo hace? Por un lado, contando su historia desde el momento en que Jorge Bergoglio era un niño que jugaba al fútbol con sus amigos, escuchaba música e iba al colegio, como cualquier chico de su edad y de cualquier época.
Y por otra parte, resaltando las palabras simples y concretas que el Papa les ha dedicado a los chicos en más de una ocasión: “Sean alegres”; “Si le tienen que decir algo a alguien, se lo dicen en la cara” y frases por el estilo.
Ese mismo estilo llano y frontal es el que hace llegar las enseñanzas más allá de las creencias religiosas de cada lector, porque si bien es cierto que el propio Francisco centra su mensaje en conceptos relacionados con Jesús y su misericordia (que no se obvian en el libro y seguramente quien los comparta podrá leer algunos tramos con mayor profundidad), las enseñanzas de Francisco están dirigidas a cualquier persona de buena voluntad, como cuando dice en típico argentino: “No le saquen el cuero a nadie”. Sus conceptos son universales porque el amor al prójimo, que es su columna vertebral, no tiene que ver con la religión, sino con la esencia del hombre. Y así queda reflejado en este libro.
Como complemento, anexos del tipo “Curiosidades papales”, “El papa tuitero” o “Carta a los educadores” le agregan atractivo al libro y ayudan a contextualizar el mensaje.
En medio de la “Franciscomanía”, no faltarán en nuestro país los chicos que al verlo omnipresente desean saber más sobre él y le dan más importancia a su mensaje. Ahí está la razón de este libro.