A pedido de la Iglesia, el Ejército lleva su ayuda al barrio Padre Ricciardelli

(Barrio de Flores) Los contagios de Covid-19 avanzan en las zonas vulnerables, y en ese marco el Ejército pone por primera vez un pie en la Ciudad con su ayuda social. Desde este viernes, un grupo de efectivos del Regimiento de Infantería de Patricios, con sede en Palermo, da asistencia en el barrio Padre Ricciardelli. La misión: preparar el almuerzo en un comedor donde hubo contagios y las personas que tenían a cargo la tarea están enfermas o debieron quedar en aislamiento.

El pedido de ayuda en la emergencia surgió de la Iglesia. Del padre Juan Isasmendi, a cargo de la parroquia “Madre del Pueblo”, y llegó al Ministerio de Defensa que conduce Agustín Rossi, a través del obispo villero, Gustavo Carrara, que fue cura de esa parroquia. Se recuerda que cuando fue nombrado obispo, a instancias de Francisco a fines de 2017, a Carrara lo llevaron en andas al salir de la Catedral donde fue ordenado, sus feligreses del Bajo Flores.

Este primer desembarco en la Ciudad es un caso puntual, que se extenderá en principio por una semana, con un equipo de soldados que saldrá del Regimiento de Patricios. Con los relevos implicará entre 30 y 40 efectivos en la tarea. Según Clarín, los militares que actúan en el terreno trabajan en “cápsulas” que se van relevando, y se someten a un estricto proceso de “descontaminación” al terminar cada jornada.

Para el Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas, que conduce el general Juan Martín Paleo, será un “piloto” dentro del distrito porteño. Fuentes del Edificio Libertador dijeron a Clarín que el martes próximo está prevista una reunión con funcionarios de Defensa y del gobierno porteño para evaluar otros tipos de tareas logísticas y de asistencia, en línea con las que realiza el Ejército en La Matanza y otros barrios del conurbano, y la Armada y la Fuerza Aérea también en otros puntos del país. NR