(CABA) El Gobierno obligará a las empresas distribuidoras eléctricas (Edenor y Edesur) a pagar las multas por el incumplimiento de su servicio o las interrupciones en el suministro. “Iniciamos un camino de normalización que va a incluir que las empresas tengan un incentivo a hacer las cosas bien porque les vamos a cobrar las multas”, dijo Alejandro Sruoga, secretario de Energía Eléctrica, como una de las conclusiones de la audiencia pública de la luz que se realizó el viernes pasado.
El reclamo de mayor control por parte del ente regulador (Enre) fue una constante de las asociaciones de consumidores, intendentes y particulares que concurrieron al encuentro. El Gobierno entiende que, con mayor tarifa, las empresas contarán con fondos para realizar mejoras.
“Durante todos estos años, las multas se devengaban y no se cobraban”, explicó el funcionario. A partir de febrero regirá un nuevo cuadro tarifario, aunque la corrección todavía no fue determinada. Las empresas hablaron de un 30% “promedio” en el valor de distribución -lo que cobran por su servicio-pero en los casos que presentaron en la audiencia las subas van del 50% en hogares a más de 80% en comercios, como exhibió Edenor en sus ejemplos.
“Hay un objetivo político de regularizar la situación del sistema eléctrico antes del 1° de febrero de 2017”, planteó Sruoga. El objetivo es “empezar el próximo año con un régimen tarifario de equilibrio y multas que sean incentivos reales”, señaló. “Habrá un régimen en el cual si las empresas no cumplen el sendero de mejora de calidad, van a ser sancionadas y el usuario verá el efecto de esas multas en un descuento de su factura”, afirmó.
Edenor se comprometió a invertir $ 25.000 millones en el próximo lustro, mientras que Edesur destinará $ 14.000 a mejorar su red si se cumplen con sus expectativas de tarifas. En diciembre, se celebrará otra audiencia pública -de alcance nacional- que definirá los precios mayoristas de la energía. Allí se planteará si el Estado nacional seguirá subsidiando a la generación (como hace ahora) o disminuirá su intervención en ese sector.
“El ENRE le pidió a las empresas recuperar las 10 horas de corte por usuario y la frecuencia de cuatro cortes también al año (como sucedía hace 10 años)”, explicó Sruoga. Tras el kirchnerismo, el sistema está por encima de las 30 horas de corte de servicio por usuario al año.
El ministerio de Energía también apunta a una renovación del ente regulador. Se está realizando una convocatoria pública para los puestos directivos, donde los antecedentes laborales y académicos sean considerados para la conducción. Hasta aquí, la dirección del ENRE era política. El Gobierno hablan de una conducción “idónea”, sin la discrecionalidad que pueden tener los políticos cuando ocupan estos cargos.
Aún con los aumentos que planean, las empresas consideran que las tarifas locales serán más baratas que las de otros vecinos. Hablan de US$ 0,08 por kw/h, que es menos de la mitad que Brasil (US$ 0,18) y un tercio de lo que cobra Uruguay (US$ 0,24).
S.C.